Sorhea PORTALIS Barrera Inalámbrica

PORTALIS, es una barrera solar infrarroja que está conectada a un sistema G-FENCE para cumplir con la detección perimetral de puertas. Creación de una pared de detección inmaterial e intransitable, con cinco celdas de doble haz a una altura de 2,5 mo 3 m, dependiendo de la puerta que se debe proteger.

Los haces se multiplexan a través de la sincronización óptica, se pueden configurar en modo de detección simple o doble y de altura ajustable. PORTALIS también tiene cuatro modos de información de alarma: intrusión, tapa anti-escalada, tamper, descalificación (alarma técnica).

La información de alarma se conecta a través de contactos polarizados a las entradas auxiliares de una unidad de control G-FENCE cercana. PORTALIS solo se puede usar como un accesorio del sistema G-FENCE. 

Recomendación

Para utilizar las barreras correctamente, es importante asegurarse de que la barrera no esté instalada en un soporte inestable (por ejemplo, un poste mal sellado, etc.). Antes de instalar una barrera infrarroja, verifique que el terreno esté bastante nivelado y garantice la estabilidad de las columnas con el tiempo. Se puede tolerar un máximo de 10 ° de elevación entre las columnas. En caso de una elevación superior a 10 °, comuníquese con el departamento de ventas de SORHEA. Verifique que ninguna vegetación pueda bloquear los rayos, sin importar la estación y las condiciones climáticas (viento). También es importante verificar la limpieza de las cubiertas: es importante limpiarlas con un paño suave y húmedo al menos una vez al año.

Tecnología

Esta tecnología funciona a una longitud de onda superior a la de la luz visible (950 nm), lo que hace que el haz IR sea invisible a simple vista.

Los rayos infrarrojos son transmitidos y recibidos por células infrarrojas. Las células del transmisor generan un haz pulsado que se envía hacia las células receptoras que capturan los impulsos infrarrojos y los transforman en señales eléctricas. En ausencia o variación de la señal (pérdida del 95% de la señal transmitida), se activa una alarma de intrusión. Para evitar que las células receptoras sean interferidas por los rayos infrarrojos transmitidos, las celdas se multiplexan.

Este principio consiste en transmitir un pulso infrarrojo de forma sincronizada, a través de un enlace óptico o cableado entre las columnas del transmisor y del receptor. Esta característica también se usa para optimizar la alineación de las celdas ("retroalimentación de alineación"). Todas las barreras SORHEA IR están multiplexadas (excepto UNIRIS II y BIRIS II).